Desde que el ministro de Justicia, el Sr. Gallardón, diera por concluida la redacción del anteproyecto de lo que llaman Protección de la Vida del Concebido y de los Derechos de la Mujer Embarazada, no ha habido un solo día donde se enfrentaran las dos posiciones al respecto: a favor y en contra. Realmente esta ley sobre el aborto no deja indiferente a nadie, y suma y sigue en cuanto a las críticas; ya sean de diputados de otro signo político, parte de la sociedad española y de sociedades científicas. Ginecólogos, pediatras y psiquiatras, han abanderado una férrea oposición a esta ley.
Por contra, asociaciones que llevan el marchamo de "bioéticas", aplauden de forma partidista (nunca mejor dicho) las prebendas del Sr. Ministro. Por ejemplo, tenemos el caso de la Asociación de Bioética de Castilla La Mancha que ha defendido el proyecto de Ley Orgánica para la Protección de la Vida del Concebido y de los Derechos de la Mujer Embarazada, asegurando que es "histórico que se empiecen a dar pasos en la defensa del concebido", aunque en todo caso la reforma "está lejos de ser la ideal". En una mezcla de catarsis ideológica fundamentalista y los libros de biología, de no se sabe que editorial afín; donde se encuentra la defensa del no nacido, excluyendio de forma categórica a la madre (léase, mujer o posible madre) y sus derechos.
A buen seguro, gran parte de los congresistas estarán satisfechos con la iniciativa; pero consta, entre pasillos, la desunión que existe en este tema, especialmente en lo que toca a sus mujeres. Tras la votación en el Congreso de los Diputados, y ante el rechazo de la propuesta de la oposición, el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha mostrado su "respeto por las minorías" y ha valorado el resultado de la votación como la "expresión de la voluntad popular", reflejo de que la "mayoría de representantes de los ciudadanos ha rechazado que no se debata la ley del aborto". Seguimos sin consenso, nada raro por estos lugares.
Dejando de lado el origen ideológico de esta ley, es fácilmente visible que la perjudicada es la mujer. Se recortan, de nuevo, derechos; se invade ese principio bioético de la autonomía: queda amputada por ley. Amen de cercenar la antigua ley de plazos, común en el resto de Europa y el aborto libre en las primeras 14 semanas. Lo más irrisorio es que antes de abortar, se exija a la mujer un plazo para reflexionar sobre la interrupción: con 7 días basta!
Visto lo visto, solo queda cantar el "madrecita que me quede como estoy". Esto no tiene solución, bueno, sí tiene una solución, pero será en dos años.
Hola Javier, a mí de lo que mencionas me parece muy triste que "asociaciones de bioética" sean tan beligerantes en este aspecto y olviden o dejen de lado la protección de otras personas a las que la legislación ha quitado derechos... como los "no nacidos"... en España que no sólo no tienen derecho a asistencia sanitaria sino, a lo que se ve, no tienen derecho a la vida... o cómo dice un chiste macabro "no tienen derecho a nadar en aguas españolas"....
ResponderEliminarNo es lo que dicen lo que me alarma... es su silencio lo que les delata. No tienen ni moral ni ética.
Gracias Salva por acercarte a este tema. Desgraciadamente esto es así, en temas como este, antes que un debate serio y riguroso se intenta justificar las acciones de gobierno con el "esto es lo que hay". Mal vamos.
ResponderEliminarHola Buen día, saludos desde Hermosillo, Sonora México, en lo personal creo que hablar de aborto es tema delicado, ya que existen intereses encontrados, a si como emociones y decisiones encontradas, un ejemplo de ello seria, un caso presentado en nuestro país, una niña de 10 años violada queda embarazada de su agresor, la comunidad cristiana le prohibía abortar y demás, la familia y ella misma (la niña) si quería hacerlo, sin embargo es un tema bastante delicado, ya que si nos ponemos en el lugar de la niña y de la madre de ella , tomaríamos una decisión drástica y en cambio la sociedad, quizá tomaría otra, por ello mi comentario de que estos temas gracias a la bioética quizá las personas externas a cualquier caso semejante, puedan comprender mas el sentir las emociones y decisiones que toma alguna persona en particular ante un echo de cualquier índole semejante a este ejemplo. y no juzgar a las personas por las decisiones que tomen.
ResponderEliminarGracias....